De las calles a la fama: la dura historia de Paris, la perra de Gran Hermano

Una nueva integrante en la casa de Gran Hermano conmueve a todos. Se trata de una perra galgo que sufrió el abandono y el maltrato, y que ahora encuentra una nueva oportunidad en el reality. Con solo un ojo funcional, su historia busca generar conciencia sobre la adopción y el rescate animal.

Paris fue encontrada en situación crítica en General Villegas, Buenos Aires, en marzo de 2022. Estaba preñada y con visibles signos de maltrato cuando vecinos solidarios la llevaron a una veterinaria para recibir atención urgente. Dos días después de su rescate, dio a luz a sus cachorros, quienes fueron adoptados rápidamente. Sin embargo, Paris tuvo que permanecer bajo cuidados médicos debido a las secuelas físicas que arrastraba, incluyendo la pérdida de visión en su ojo izquierdo.

A pesar de su difícil pasado, esta galga demostró una increíble capacidad de recuperación. Gracias a la paciencia y el cariño de quienes la cuidaron, volvió a moverse con confianza y a disfrutar de la compañía humana. Su caso es un reflejo de la difícil realidad de muchos galgos en Argentina, usados para caza o carreras y luego descartados cuando dejan de ser «útiles».

Su llegada a Gran Hermano 2025 no es casualidad. Santiago del Moro, conductor del programa, explicó que el objetivo de su incorporación es visibilizar el problema del abandono animal y fomentar la adopción responsable. “Este es un espacio para dar un mensaje importante. Paris merece amor y un hogar definitivo”, expresó en sus redes sociales.

Al finalizar el ciclo, los participantes tendrán la oportunidad de adoptarla, como ha sucedido en ediciones anteriores con otras mascotas que pasaron por la casa. La esperanza es que esta vez Paris encuentre una familia dispuesta a brindarle el cariño y la estabilidad que tanto merece.

En Argentina, se estima que millones de perros y gatos viven en la calle sin recibir la atención que necesitan. Mientras tanto, los criaderos continúan reproduciendo animales con fines comerciales, muchas veces sin control ni regulación. Casos como el de Paris evidencian la importancia de la adopción y el rescate como alternativas para cambiar estas realidades.

Paris no busca fama, sino un hogar. Y su historia, lejos de ser única, representa a miles de animales que esperan una segunda oportunidad.