13 de mayo de 2025

Comer huevos: ¿cuánto es mucho y cuánto es saludable?

Cuántos huevos se pueden comer por semana sin afectar la salud, según expertos

Durante años, los huevos estuvieron en el centro del debate nutricional debido a su contenido de colesterol. Durante décadas, se recomendó limitar su consumo para prevenir enfermedades cardiovasculares. Sin embargo, las investigaciones más recientes han matizado esta postura: hoy, expertos coinciden en que el consumo moderado de huevos puede ser parte de una dieta saludable para la mayoría de las personas.

El huevo y el colesterol: una mirada actualizada

La Asociación Americana del Corazón (AHA, por sus siglas en inglés) considera que comer hasta un huevo por día —es decir, unos siete por semana— es seguro para adultos sanos. Es más, en personas activas o que realizan ejercicio físico con regularidad, ese número puede extenderse hasta los 12 huevos semanales sin efectos adversos para la salud cardiovascular.

Por el contrario, quienes tienen diabetes tipo 2 o presentan alto riesgo cardíaco deben ser más cuidadosos. En estos casos, se recomienda reducir la ingesta a entre 3 y 4 huevos por semana, ya que el impacto del colesterol en sangre podría ser mayor.

La preparación importa: cómo cocinar huevos de forma saludable

No solo importa cuántos huevos se consumen, sino también cómo se preparan. Las opciones más saludables incluyen los huevos cocidos, pasados por agua o escalfados, ya que conservan sus nutrientes sin incorporar grasas extras. En cambio, los huevos fritos, especialmente si se cocinan en manteca o aceite reutilizado, pueden aportar grasas saturadas y calorías innecesarias.

Un alimento completo y nutritivo

El huevo es considerado una proteína de alto valor biológico, fundamental para la regeneración de tejidos y la salud muscular. También aporta vitaminas esenciales como la A, D, B12 y riboflavina, clave para el sistema inmunológico, el metabolismo y la salud ósea. Además, contiene minerales como fósforo, selenio y zinc, esenciales para el sistema nervioso y la producción de energía.

Algunas variedades —como los huevos de gallinas alimentadas con pasto o enriquecidos con omega-3— tienen un plus nutricional, con grasas saludables que benefician al corazón y tienen efectos antiinflamatorios.

Conclusión: huevos sí, con equilibrio

El consenso actual entre nutricionistas y cardiólogos es claro: los huevos pueden ser parte de una alimentación equilibrada. El consumo moderado no solo es seguro, sino también beneficioso para la salud. Como siempre, la clave está en la moderación, la personalización según el estado de salud de cada persona, y una preparación adecuada.

Incorporados de forma inteligente, los huevos siguen siendo una opción nutritiva, económica y versátil para todas las edades.