El arquero Sergio Romero, de 38 años, se despidió este martes de Boca Juniors y seguirá su carrera en Argentinos Juniors, club que salió rápidamente a buscar un reemplazo tras la grave lesión del “Ruso” Rodríguez.

En su último día en el predio de Ezeiza, Chiquito habló con sinceridad sobre su salida del Xeneize y recordó el episodio que marcó un antes y un después en su vínculo con el club.

“Fue la sentencia para mí en este club”, admitió el exarquero de la Selección argentina al referirse al incidente del 21 de septiembre de 2024, cuando se enfrentó con un hincha en la Bombonera tras la derrota ante River en el Superclásico.

“No es un chau, sino un hasta luego”

Lejos de mostrar rencor, Romero se despidió con gratitud hacia los hinchas, sus compañeros y el presidente Juan Román Riquelme, a quien definió como “un amigo”.

“Román es el presidente, pero también un amigo. Arreglamos todo en tres minutos. No puso ninguna traba y me deseó lo mejor”, comentó.

El arquero también dejó un mensaje a los fanáticos:

“Al hincha, agradecimiento. Me hicieron sentir en mi casa. En cada partido alentaron y apoyaron”.

Sobre su futuro, Chiquito aseguró estar motivado para demostrar que sigue vigente:

“Voy a tratar de hacer lo mejor en Argentinos Juniors. En el último tiempo no rendí al 100%, pero voy a demostrar que sigo activo y que al Bicho le va a ir bien”.

Despedida oficial del club

Boca confirmó la salida del arquero con un comunicado breve:

“El Club Atlético Boca Juniors comunica que el jugador Sergio Romero ha firmado la rescisión del contrato que lo vinculaba con la institución. Le agradecemos por su etapa en el club y le deseamos muchos éxitos en sus futuros desafíos”.

Romero había llegado al Xeneize en 2022 y disputó más de 60 partidos, con actuaciones destacadas en la Copa Libertadores 2023, donde fue clave en la tanda de penales ante Palmeiras.

Ahora, su nueva etapa será en Argentinos Juniors, con el objetivo de mantener al Bicho competitivo y demostrar que la experiencia todavía cuenta bajo los tres palos.