7 de junio de 2025

Receta Clásica de Albóndigas Caseras: Jugosas y Llenas de Sabor

Albóndigas Caseras: Jugosas, Sabrosas y Fáciles de Hacer

Una receta rendidora, deliciosa y perfecta para cualquier día de la semana.

¿Hay algo más reconfortante que un buen plato de albóndigas caseras, recién hechas, bien jugosas y nadando en una salsa sabrosa? Este clásico de la cocina tiene todo lo que nos gusta: es fácil de preparar, económico, rinde mucho y combina con lo que tengas en casa —arroz, fideos, puré o pan recién horneado.

Y lo mejor: no necesitás ser un experto. Con ingredientes simples y un poco de amor, podés lograr unas albóndigas que van a desaparecer del plato en minutos.


📝 Ingredientes:

  • 1 kilo de carne picada (vacuna o mixta)
  • 2 huevos
  • 1 taza de pan rallado
  • 3 dientes de ajo (bien picados)
  • Perejil fresco a gusto
  • Sal y pimienta (a conciencia)
  • 1 cebolla chica (picada)
  • ½ morrón rojo (picado)
  • 1 taza de puré de tomate
  • 1 taza de agua
  • Un chorrito de aceite de oliva
  • 1 hoja de laurel

👩‍🍳 Preparación paso a paso:

  1. Armado de la mezcla:
    En un bowl, mezclá la carne con los huevos, pan rallado, ajo, perejil, sal y pimienta. Amasá con las manos hasta que todo quede bien unido.
  2. Formado y sellado:
    Formá bolitas del tamaño que te guste. En una sartén con un poco de aceite, sellalas a fuego medio hasta que estén doradas por fuera. Reservá. Tip: Si las albóndigas se desarman, agregá un poco más de pan rallado o un huevo extra para mejorar la textura.
  3. La salsa:
    En una olla, calentá aceite de oliva y salteá un diente de ajo con la cebolla y el morrón. Sumá el puré de tomate, la hoja de laurel y el agua. Llevá a hervor.
  4. Cocción final:
    Incorporá las albóndigas doradas a la salsa y cociná todo junto a fuego bajo durante 20-25 minutos. Apagá el fuego y dejá reposar unos minutos antes de servir.

🍽️ Ideal para acompañar con:

  • Arroz blanco
  • Fideos
  • Puré de papas
  • Pan casero (para mojar en la salsa, obvio)

Estas albóndigas son un plato que nunca falla: casero, sabroso y con ese gustito a tradición que reconforta el alma. ¡Probá la receta y contame cómo te salieron!