La búsqueda se activó el fin de semana y los jóvenes lograron regresar por sus propios medios tras pasar horas en condiciones climáticas extremas.
Durante el fin de semana, se activó un operativo de rescate en el cerro Chorrillo, a más de 3.000 metros sobre el nivel del mar, luego de que dos jóvenes se aventuraran sin contemplar las condiciones climáticas adversas.
Fernando Quiñónez, del Grupo de Rescate de Montaña, detalló cómo se desarrolló la búsqueda:
“Cuando no vuelven en el horario previsto, familiares se acercan y los derivamos a la policía al 911, donde debe ingresarse este tipo de llamado. Se generó la activación y, junto con Defensa Civil, policía y bomberos, partimos desde Quijano hacia la Estación Chorrillo, la base de subida del cerro”.
Finalmente, los jóvenes lograron llegar por sus propios medios hasta el lugar donde los esperaban los rescatistas y familiares:
“Empezamos el domingo a las 7 de la mañana y terminamos bajando los últimos del cerro alrededor de las 23 horas. Los chicos aparecieron por otro sector del cerro”, relató Quiñónez.
Pasaron la noche en condiciones extremas
Los jóvenes pasaron toda la noche a la intemperie, enfrentando temperaturas extremadamente bajas y un clima muy cambiante. Según el rescatista:
“Se desorientan, se quedan sin batería en el teléfono, el tiempo no era el mejor. Muchas veces uno va al cerro y las condiciones climáticas no son las apropiadas. Pasaron la noche intentando resguardarse y, con suerte, lograron no entregarse al frío”.
Decidieron descender por la Quebrada de Incamayo hasta llegar a la ruta y reencontrarse con sus familiares en Chorrillo.
Condiciones extremas del cerro
Quiñónez explicó que la amplitud térmica entre el día y la noche es muy grande a esa altura, y que el clima era complejo, con niebla que reducía la visibilidad a 40 metros y alerta de tormenta:
“No estaba en condiciones de equipamiento para pasar la noche a la intemperie. La suerte jugó un papel importante para que pudieran descender sin mayores incidentes”.