El exgobernador de Tucumán José Alperovich, condenado a 16 años de prisión por violación y abuso sexual, volverá a estar en el centro de la escena pública tras obtener autorización judicial para casarse con Marianela Mirra el próximo 27 de noviembre, en su departamento de Puerto Madero, donde cumple prisión domiciliaria.

La boda fue aprobada por la Justicia luego de que su defensa presentara una solicitud formal ante el tribunal, en la que se detallaron las condiciones del evento. Según trascendió, será una ceremonia íntima, con entre 20 y 30 invitados, todos seleccionados del círculo más cercano del exmandatario.

Una boda bajo custodia judicial

Debido a su situación legal, Alperovich no podrá abandonar su domicilio, por lo que la ceremonia se realizará dentro de su residencia, bajo las condiciones impuestas por el tribunal. El casamiento se celebrará a poco más de un mes de su divorcio de la exsenadora Beatriz Rojkés, con quien compartió décadas de vida política y familiar.

La Justicia permitió la realización del enlace luego de constatar que no existen impedimentos legales para contraer matrimonio, aunque se estableció que el evento será monitoreado y no podrá incluir actividades que violen el régimen de prisión domiciliaria.

Una relación de larga data

El vínculo entre Alperovich y Mirra no es nuevo. Según fuentes allegadas, la pareja mantiene una relación de más de veinte años, aunque siempre evitó el foco público. Marianela Mirra, conocida por su participación en Gran Hermano 2007, habría retomado el contacto con el exgobernador en los últimos años, y la decisión de casarse marcaría la formalización de un vínculo que atravesó distintos períodos de distancia y reserva.

La condena que marca su presente

Alperovich fue condenado en un juicio oral de cuatro meses por haber abusado sexualmente de su sobrina y exsecretaria, entre 2017 y 2018, en hechos ocurridos en Buenos Aires y Tucumán. La sentencia lo declaró autor penalmente responsable de abuso sexual simple reiterado en tres oportunidades, dos intentos de abuso y seis abusos con acceso carnal.

Actualmente, cumple su pena en prisión domiciliaria debido a su edad y a su estado de salud.

🔎 Polémica y repercusiones

La decisión de casarse mientras cumple condena generó fuerte polémica en los ámbitos políticos y sociales. Diversas voces criticaron que el exmandatario pueda realizar este tipo de eventos pese a su condición judicial, lo que reaviva el debate sobre los privilegios de las figuras públicas condenadas por delitos graves.

Aun así, desde su entorno aseguran que la ceremonia será “estrictamente familiar y sin ostentaciones”, en un intento por evitar más controversias en torno a un caso que marcó un antes y un después en la historia política y judicial de Tucumán.