El histórico templete de San Cayetano, ubicado en la ciudad de Salta, fue blanco de un indignante robo durante la madrugada del sábado. Delincuentes ingresaron forzando el perímetro del predio y se llevaron valiosos equipos de sonido y objetos litúrgicos que habían sido adquiridos gracias al esfuerzo colectivo de la comunidad religiosa.

Ni las rejas ni la fe lograron frenar a los ladrones. Según informaron desde la parroquia, los delincuentes treparon los muros laterales del templo —ubicado en una zona bien iluminada— y, tras violentar los accesos, se llevaron una consola de sonido profesional, micrófonos inalámbricos, parlantes y otros elementos esenciales para la celebración de las misas. El valor estimado del botín supera los $3 millones de pesos.

“El dolor es enorme, es un golpe muy duro para nosotros”, expresó con impotencia un fiel de la parroquia al enterarse del hecho. La noticia generó una profunda conmoción entre los vecinos y devotos que acuden a diario a este emblemático lugar de oración y encuentro espiritual.

El robo ocurre en un momento especialmente delicado: a menos de un mes de la tradicional festividad del 7 de agosto, fecha en la que miles de salteños se congregan para rendir homenaje a San Cayetano, patrono del pan y del trabajo. La pérdida de los equipos compromete la organización de la misa central y de diversas actividades litúrgicas previstas para esa jornada.

Desde la parroquia hicieron un llamado solidario a la comunidad para evitar la compra de equipos ofrecidos en condiciones irregulares. “Pedimos que si alguien recibe algún ofrecimiento sospechoso, dé aviso inmediato al 911. Nos duele lo que pasó, pero confiamos en que, con la ayuda de todos, podremos recuperar lo que nos quitaron”, manifestaron desde la organización.

La Policía de Salta trabaja intensamente en el análisis de las cámaras de seguridad del sector. No se descarta que los delincuentes hayan actuado con información previa sobre los movimientos en la zona y el valor de los objetos sustraídos.

El caso reaviva el debate sobre la seguridad en espacios religiosos y pone de relieve la vulnerabilidad de aquellos lugares que, más allá de su valor material, cumplen una función social y espiritual clave para miles de familias salteñas.

Fuente: medios/El Tribuno