Cómo ahorrar hasta un 40% de combustible: claves para manejar con inteligencia en tiempos de subas

Con el reciente aumento del precio de la nafta, producto del alza del petróleo crudo en medio del conflicto en Medio Oriente, cada litro que se carga en el surtidor duele más que nunca en el bolsillo. Pero algunos secretos al volante pueden marcar la diferencia. Hasta un 40% de ahorro en combustible es posible si se aplican técnicas de conducción eficiente, que involucran desde el tablero hasta los neumáticos del vehículo.

El uso inteligente del acelerador, la correcta administración de las marchas, el control de la presión de los neumáticos y la planificación de los trayectos son algunos de los puntos esenciales para reducir el consumo.

Según expertos en eficiencia energética, la velocidad ideal para ahorrar combustible oscila entre los 90 y 100 km/h. Bajar 10 km/h en autopista puede significar hasta un 9% de ahorro. Además, mantener una velocidad constante y evitar frenadas o aceleraciones bruscas ayuda a conservar el rendimiento del motor.

Trucos clave para reducir el gasto

• No saltarse la primera marcha, pero hacer los cambios de forma larga y a bajas revoluciones.
• Evitar presionar innecesariamente el embrague y el acelerador mientras se espera en un semáforo.
• Usar el freno motor y desacelerar de manera progresiva en lugar de frenar bruscamente.
• Tomar las curvas entre 16 y 24 km/h para evitar exigir el motor.
• Apagar el motor en detenciones prolongadas y no dejar el auto en ralentí más tiempo del necesario.
• Mantener la presión adecuada de los neumáticos, según el manual del vehículo.
• Evitar cargas innecesarias: 100 kilos extra reducen el rendimiento hasta un 6%.
• Planificar los viajes. Diez minutos de más por no saber adónde ir pueden aumentar un 14% el consumo.

También se aconseja observar el cuentarrevoluciones: la aguja debe mantenerse estable y dentro de un régimen parejo, evitando picos que afecten el rendimiento.

Manual oficial y recomendaciones

La Subsecretaría de Energías Renovables y Eficiencia Energética publicó una guía oficial antes de la pandemia con consejos prácticos para conductores de autos livianos. Allí se destacan recomendaciones de manejo, sugerencias para elegir autos más eficientes y un sistema de seguimiento para el gasto cotidiano de combustible.

“Estilos de conducción y comportamiento como la aceleración, el frenado y la velocidad de conducción, así como las condiciones externas como el clima y el tráfico, afectan directamente el consumo de combustible”, indica el documento.

En un contexto de inflación y ajustes, manejar bien es más que una cuestión de estilo: es una necesidad. Y aplicar estos consejos puede ser la diferencia entre llenar el tanque una vez al mes o cada quince días.

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