28 de abril de 2025

INDEC: la inflación de marzo llegó al 3,7% y superó el 55% en un año

El Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) informó que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de marzo registró una suba del 3,7%, lo que representa una aceleración respecto al 2,4% de febrero. En términos interanuales, la inflación acumulada alcanzó el 55,9%, con una fuerte incidencia de los alimentos y otros factores estacionales.


Alimentos, educación y factores estacionales impulsaron la suba

El dato mensual estuvo impulsado principalmente por:

  • La suba en alimentos y bebidas, que marcó un 5,9% a nivel nacional.
  • El inicio del ciclo lectivo, que impactó en el rubro educación.
  • Ajustes estacionales en distintos sectores, como prendas de vestir, transporte y servicios.

La aceleración inflacionaria sorprendió, ya que tanto consultoras privadas como el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) del Banco Central preveían una suba más moderada, entre el 2,4% y el 2,9%.


Desglose regional: foco en la región pampeana

En la región pampeana, donde se encuentra Bahía Blanca, los aumentos más relevantes durante marzo fueron:

  • Alimentos y bebidas no alcohólicas: +1,77%
  • Prendas de vestir y calzado: +0,36%
  • Educación: +0,28%
  • Restaurantes y hoteles: +0,35%

Los demás rubros, como salud, transporte, vivienda, y comunicación, registraron incrementos menores al 0,25%.


Comparación interanual: alimentos lideran el impacto

En el análisis de variación interanual (marzo 2023 – marzo 2024), el rubro alimentos y bebidas no alcohólicas continúa liderando el impacto inflacionario en todas las regiones del país. En la región pampeana, este ítem también fue el de mayor incidencia, seguido por educación, vivienda y vestimenta.


Contexto económico: acuerdo con el FMI y cambios en el mercado cambiario

El informe del INDEC se conoció horas antes de que el Gobierno oficializara un nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional por USD 20.000 millones, y anunciara el fin del cepo cambiario junto con un nuevo esquema de bandas para el tipo de cambio oficial.

Estas medidas forman parte de un intento por estabilizar el mercado en un contexto de tensión cambiaria y volatilidad financiera, que pone presión sobre los precios y el poder adquisitivo de los hogares.